Es ya una costumbre que Paco Rabanne Parfums cuente historias a través de sus perfumes. Invictus (77 euros) surgió del deseo de hablar del deporte de una forma innovadora, destacando su componente de fantasía. Para convertir este relato en una realidad olfativa, Paco Rabanne recurrió al talento de la perfumista Véronique Nyberg (IFF) que se rodeó de otros tres talentos: Anne Flipo, Olivier Polge y Dominique Ropion.
Más de dos años y medio de investigaciones han deparado una fragancia texturada, con cuerpo, y con un relieve y un fondo muy presentes.
Por su parte, el sensual toque oriental de Noir (115 euros, Eau de Parfum de 100 ml.) intenta capturar la dualidad del hombre según Tom Ford: sofisticado y urbano; pero también íntimo y enigmático. Es la tensión entre lo público y lo privado lo que queda retratado en Noir.
El propio diseñador estadounidense lo explica: “Noir es enigmática, compleja y sorprendente. Sus notas especiadas son suaves y han sido extraordinariamente elaboradas; yuxtapone una elegante y femenina rosa con el fresco y preciado orris. Después, la calidez oriental se abre paso de una forma casi adictiva. Noir es posiblemente mi fragancia más personal hasta el momento”.